Los sueños de Su

-En k estas, ritalin?-

-Nada aún-

-No kieres pasarte un rato?-

-Dale-

Nueve de la mañana. Kieres jugar tan temprano. Y komo imantada me levanto para enkontrate, no podría ser de otra forma tu ser metaliko es tan brillante k enkandila y de kuriosidad murió el gato.

Frías calles centrikas me reciben, me muevo entre los zombis protegida por la musika k kubre mis oídos.  Sobrevivo, llego intakta al forestal y saludo a la Fa, subo por las escaleras hasta el 4to. Piso de un casi hermoso edificio antiguo. Desde el pasillo puedo oir tu musita.

-Hola, ritalin-

-Todo bien, Su?-

-Todo bien-

K mejor recibimiento k un kafé, un trozo de pastel, frutos de la kosecha y la kompañia de os mutantes, para komenzar.

Sumergidos los cuerpos en el sillón, se pasan las horas konversando, viendo por la ventana komo pasa un día de invierno en Santiago, el río, el cerro, el parke, los infinitos automóviles pasar, uno tras otro, tras otro, komo las kanciones k eliges una tras otra, tras otra.

-Te vas a kasar?-

-Si poh-

-Y te vas a limitar a una sóla persona? Kreo k la idea del matrimonio es una estupides, komo vas a kreer k el amor solo puede darse entre dos personas en una relación de uno a uno: si es verdadero es de uno a uno y si no es falso. Y lo cierto es justo lo kontrario: si es entre uno y uno no puede ser verdadero. Entonces es falso, imaginario. Las personas k se kasan están fingiendo y se engañan a si mismas, no solo a la otra persona. Sino que a si mismas.

Si te interesa la belleza. Como vas a evitar ver a las personas bellas, a interesarte por ellas? La únika solución sería matar ese interés, pero si haces akello dejaría de interesarte inklusive tu esposa. Por eso las parejas pierden el interés mutuamente.

Si te interesa la belleza, te seguirán interesando las personas bellas, puede k alguna más en konkreto, k incluso te interese tanto una persona k kieras vivir kon ella, eso es cierto, pero eso no signifika k vaya a desaparecer tu interés.

-Acida, otro pedazo de pastel te haría bien-

-Prefiero otra karguita de tu kosecha tardia-

-Dale, pero el pastel te lo komes igual, no kiero verte en los huesos-

-Padre? Oh! Padre, hace un par de años k no te veía!-

-Ja, ja-

El cielo se pone kada vez más plateado, tu kara se sumerge en la oskuridad del atardecer, mis parpados pesan kada vez más, pestañeo larga y lentamente. La hora magika de la fotografía.

-Kieres esperarme?-

-Dale-

Una siesta de un par de horas mientras kumples tu rol asalariado. Abrazo al sillón, me kubro kon una manta pesada, la mente se entrega a los rekuerdos, los pensamientos, las imágenes, el sueño, todo se me mezkla y rekuerdo las historias k me kuentas de las kosas k sueñas. La korriente de sueño me arrastra y me lleva al mar, esa es la sensación k me  das, de tener k nadarme un mar entero, pero ya solo eskucho la musika. No hay nada, no keda más k el sólo sueño. La tarde se va, la noche se aproxima basta, el vino, la kosecha y Su.